Soñar, que bello es soñar,
Cerrar los parpados
Y hundirse en el misterio
De tus anhelados deseos,
Hacer de una ilusión imposible
La más hermosa realidad
E iluminar el silencio
Con esos ojos negros
Cual lucero de auroras
Y rubores mágicos
De cristales azules…
Dejar de extrañarte un momento
Tenerte a mi lado
Aferrada a mis brazos,
No soltarte nunca
Decirte te amo sin miedo
A tu ingrato rechazo,
Y tú, feliz, recostada en mi pecho
Dormida en la tranquilidad
De saberte amada y protegida
Abrir las puertas de tu alma
Para mis besos cansados
De tanto esperarte,
Sí, que bello es soñar,
Destruir los demonios
Que habitan bajo tu cama
Y tocar la luz del cielo
En una noche llena de estrellas,
Pero que triste lamento aguarda
Cuando al abrir tus ojos
La realidad sigue ahí, perpetua
Con hambre de ti
Esperando su bocado matutino
Que hoy tiene como platillo principal
“Las lagrimas de mis ojos”…
No hay comentarios:
Publicar un comentario